El Tottenham ganó con facilidad al Ludogorets búlgaro, con un doblete de Vinícius, un golazo espectacular de Harry Winks y la sentencia de Lucas Moura para seguir al frente de la clasificación de su grupo.
Muy fácil desde el principio
Desde el arranque, el quipo que entrena Mourinho se sintió muy cómodo enfrente de un cuadro búlgaro endeble, que no supo aprovechar las salidas a la contra. Al cuarto de hora, quien aprovecho un error visitante fue Dele Alli, que asistió a Vinícius para que éste abriese la lata. El propio delantero brasileño fue el encargado de poner tierra de por medio antes del descanso y dejar encarrilado el partido, que fue muy cómodo para los de Londres.
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El sopor de la facilidad y la superioridad 'spur' lo rompió Winks con un bellísimo gol desde 50 metros, en un tiro pegado a la línea de cal que pilló al meta Iliev adelantado y que besó el larguero antes de llegar a las redes visitantes. Después, Lucas Moura, con una definición digna de su nivel, en la frontal del área chica, dejó el choque sentenciado con el definitivo 4-0, que mantiene al Tottenham como primero de grupo.