Es público que José Mourinho nunca asume ninguna responsabilidad. Y su decepcionante paso por el Manchester United no iba a ser una excepción.
En una entrevista concedida al exblaugrana Gary Lineker para la BBC, el entrenador portugués criticó la confección de la plantilla para escudarse por la pobre trayectoria de los 'red devils'.
Una puñalada encubierta a su otrora mentor Louis van Gaal, con el que ya no mantiene una buena relación.
Morinho aseguró: "El United vendió jugadores que yo nunca hubiera vendido y compró a otros que nunca hubiera comprado", en referencia a las salidas de Di María, Chicharito y Welbeck o la llegada de Scheniderlin o Depay, a los que ya ha dado pasaporte.
El portugués también lanzó un dardo a sus futbolistas al apuntar que "no estamos listos para el Manchester United" o "no estamos dispuestos a ser un equipo dominante, no estamos listos para ganarlo todo".
Las excusas se repitieron tras el triste 1-0 ante el Rostov, en los octavos de final de la Europa League: "Ellos están más descansados, porque vienen de un largo parón de invierno y solo tienen un partido por semana". Unas excusas que se unen a las del mal estado del césped que utilizó en el partido de ida.
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Sobre la parada antológica de Romero en el último suspiro, Mourinho también puso su puntilla: "Yo ya gané aquí con un gol parecido con el Oporto, pero la de hoy no ha sido falta, por eso estoy enfadado".