El Spar Citylift Girona se reencontró este jueves con la victoria, poniendo fin a una racha de cuatro derrotas consecutivas, al vencer al Arka Gdynia polaco por un ajustado 70 a 68 en un choque de la Euroliga femenina. El partido tuvo que trasladarse al pabellón Palau Sacosta porque el de Fontajau se inundó a causa de la crecida del río Ter provocada por el temporal que esta semana está azotando Cataluña.
Con esta victoria, el cuadro de Èric Surís, que había caído derrotado en sus últimos tres encuentros de la máxima competición continental, mantiene intactas sus opciones de acceder a la siguiente ronda y abandona la última posición de su grupo.
Las constantes alternativas en la anotación marcaron el duelo; que medía a los dos últimos del igualado grupo B de la Euroliga y en el que sobresalieron Bec Allen, Barbora Balintova y Marissa Kastanek, con 22, 18 y 14 puntos, por el equipo visitante, y Naignouma Coulibaly y Sonja Vasic, con 19 y 17, por el catalán.
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Fue, precisamente, Coulibaly, con un épico tiro de dos puntos en el último segundo del partido, quien decantó un encuentro que se decidió de forma agónica y en el que cada uno de los conjuntos dominó una mitad. El debut de la pívot australiana de 31 años Abby Bishop con la camiseta del Girona fue otra de las grandes noticias que dejó un duelo que permitió que el equipo de Èric Surís recuperar la autoestima perdida en sus últimos compromisos.