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El Fenerbahçe asalta la fortaleza del Palau y somete al Barça

El vigente subcampeón de Europa, agresiivo atrás y sólido en ataque, impuso su ley con gran autoridad

Hanga lideró a un Barça que peleó pero al que le faltaron argumentos para tumbar al cuadro turco

El Barça peleó pero no pudo evitar el KO ante el Fenerbahçe / | EFE

A la décima, el Barça Lassa perdió su condición de invicto en el Palau Blaugrana y vio rota su buena trayectoria en al Euroliga (6 victorias en siete partidos). El Fenerbahçe de Zeljko Obradovic, vigente subcampeón de Europa, dejó su impronta y se llevó una contundente victoria.

Los turcos, pese a que no pudieron contar con Sloukas, hicieron una demostración de agresividad defensiva, siempre al límite de la falta, que impidió que el Barça jugara con fluidez. En ataque, el Fenerbahçe si esgrimió esa fluidez, con gran velocidad de circulación del balón, bien para amenazar en la zona a base de ir a por todas en el rebote ofensivo o buscando triples francos.

Al Barça le costó igualar la intensidad de su rival, permitida por los árbitros -liderados por el inefable Lamonica- que señalaron una técnica a Pesic. El Fenerbahçe, liderado por Muhammad, marcó el ritmo del partido dominó el rebote y abrió brecha con inusitada facilidad (17-23 y 21-37). Pesic lo intentó todo y pareció darle resultado con la presencia de Oriola y Hanga en pista (34-39). 

En el inicio del tercer cuarto, el Barça volvió a colocarse a 5 puntos (42-47). Pero aquí se acabó todo. Por que al conjunto azulgrana le faltaban más referentes en ataque (sólo algunos destellos de Tomic junto a Hanga y Kuric) ante la dura defensa turca. Y el Fenerbahçe volvió a dar una vuelta de tuerca más en defensa y siguió a lo suyo en ataque. Y consiguió romper, ya definitivamente, el choque ante un Barça que peleó al máximo pero que no pudo evitar el KO.

 

Los turcos, que no perdían ante el Barça desde 2014, mantuvieron la tradición y se llevaron el duelo con autoridad. Obradovic pudo con Pesic y el Barça pudo comprobar que para instalarse la élite europea hay que dar un paso más.