Calathes puso la magia y el Barça tumbó al Armani en seis minutos de locura

Seis últimos minutos de locura permitieron al Barça destrozar al Armani de un ex como Malcolm Delaney que amenazaba con abrir una crisis de identidad. El colectivo de Jasikevicius -que venía de perder ante el Olympiacos- supo sacar la garra y el talento cuando más quemaba el balón para seguir como líder en Europa bajo la magia en la dirección de un Calathes de récord.

Eso sí, su teórico complemento Heurtel -tras quedar inédito ante el Olympiacos- este viernesapenas jugó. Nos tememos que sí que hay caso al respecto. 

El Barça haciendo suyo el dogma de Saras de salir con los cinco sentidos puestos en la tarea hizo caso a su técnico. Buena defensa, propiciando malos tiros del Armani y un 11-0 para empezar que tendría continuidad en un 19-9 y un 23-15 al final del primer cuarto. Kuric desde fuera y Davies y Mirotic por dentro marcaron la pauta. Pero el Armani y en especial un motivado Delaney se puso las pilas.

Los lombardos endurecieron la defensa y dificultaron la produción azulgrana (9 pérdidas). Y en la otra mitad de la pista, con Hines trabajando y Delaney con ganas de venganza (13 puntos) le dieron la vuelta a la tortilla. Con un Calathes sin anotar y Heurtel y Bolmaro testimoniales en la dirección. los azulgranas se ofuscaron y perdieron clarividencia ofensiva y tensión defensiva. Y canasta a canasta, el Armani igualó primero (29-29) y llegó al descanso con su máxima diferencia gracias a un Micov ascendente (39-43 tras parcial de 16-28).

La cosa se había torcido.Y más se torció tras el paso por los vestuarios. Porque el Barça se atascó en ataque y comenzaron a surgir las dudas y la ansiedad ante un Armani con oficio. Los italianos se pusieron por delante en el marcador y, sin hacer nada, del otro jueves metieron el miedo en el cuerpo al Barça. Un miedo que se concretó en un 60-67 a seis minutos para el final del partido.

LA REACCIÓN

Pero aquí cambió todo. El Barça se puso a defender con furia y a encontrar las vías en ataque que antes se le habían negado. Resultado de todo ello fue un nuevo partido con un parcial brutal: 27-4. Con un Calathes de récord (sus 14 asistencias son la mejor marcada de un jugador del Barça en la Euroliga) el equipo funcionó como nunca apoyado en Mirotic (19 puntos y 10 rebotes), Davies (21-6 y Higgins (16-6). Y el Barça -cosas de la vida- acabó arrolllando a un rival que perdió los papeles cuando mejor lo tenía y salvando el liderato europeo.