El FC Barcelona ha encajado su cuarta derrota en la Euroliga este viernes en el Palau ante el Maccabi (67-68) en un partido en el que nunca estuvo cómodo y que acabó entregando en dos pésimos minutos finales.
El cuadro azulgrana afrontaba el choque con el objetivo de ir recuperando una brillantez que parece haber perdido en las últimas semanas pese a que había ganado sus últimos dos duelos tanto en la Euroliga como en la Liga Endesa.
Enfrente, un Maccabi que trata de superar su irregularidad y que logró ahogar a los locales con continuos cambios defensivos y, sobre todo, dos contra unos especialmente sobre Mirotic.
Pésimo primer cuarto
El Barça fue un completo caos. Perdido en ataque e incapaz de frenar el juego macabeo, todos los indicadores eran alarmantes. Por ejemplo, a los seis minutos no había dado ninguna asistencia por cinco de su rival y en la recta final llevaba +8 de valoración cuando Mirotic sumaba 6 y Higgins, 4.
Un intenso Dragan Bender anotó seis puntos y alejó a los israelís a seis puntos (8-13 a 4:04 del final del primer cuarto) mientras en el bando local el juego era espeso pese a los cuatro puntos de Calathes.
Zizic, el pívot que dejó escapar el Real Madrid, cerró el primer parcial con 12-17 justo antes de que Jasikevicius recurriese a Bolmaro y a Sergi Martínez para reforzar la defensa... y entretanto nada se sabía de Thomas Heurtel.
Pérdidas... ¡y Kuric!
El Barça perdió cuatro pelotas en los primeros cuatro minutos del segundo cuarto (tres de ellas Hanga), pero dos triples seguidos de Kyle Kuric a 5:30 del descanso). Solo 40 puntos en 15 minutos... tremendo.
Kuric y un Higgins colosal en tareas defensivas eran los únicos argumentos ofensivo del cuadro azulgrana mientras que en el otro lado de la pista Wilbekin volvió a adelantar a los visitantes (22-26 a 3:00 del descanso) con un espeluznante -6 de Àlex Abrines.
Ausente Brandon Davies por unas molestias en un gemelo, Pierre Oriola se situó con tres faltas y dejó la 'pintura' en manos de Rolands Smits (notable en defensa) y de un Artem Pustovyi que trataba de ser útil en el rebote.
Con más valoración (+15) que el resto del equipo (+13), Mirotic aprovechó cuatro tiros libres para empatar (30-30) a 39.3 de un descanso al que se llegó con la primera ventaja del Barça desde el 4-3 gracias a un tapón ilegal del exmadridista Othello Hunter sobre un Mirotic que llevaba ya 10 puntos y +18 (+12 todos sus compañeros juntos).
Mejoría ofensiva
El cuadro barcelonista entendió mejor la defensa con continuos 'dos contra uno' del Maccabi y tomó cinco puntos de ventaja tras una canasta de Calathes (44-39), pero la intensidad de Bender volvió a apretar el duelo en el ecuador del tercer cuarto (44-42).
Con 46-42, Kuric falló dos triples cuando estaba completamente solo y Tyler Dorsey se echó el equipo a sus espaldas para volver a situarlo con ventaja a 56 segundos del final del tercer cuarto (52-53) mientras Pustovyi completaba sus mejores minutos en esta Euroliga.
Con seis puntos, tres faltas recibidas, un robo y +7 del ucraniano, el Barça encaró con ventaja el último cuarto (54-53) tras dos tiros libres de un Abrines que vuelve a estar necesitado de confianza.
El Barça 'regala' el partido
Una serie de rebotes ofensivos (¡ya iban 10!) fue clave para que el Maccabi diese la vuelta al marcador y obligase a Saras a parar el partido con 59-62 a 5:28 del final.
Dos triples seguidos de Calathes y de Kuric (el tercero) sofocaron un tanto el incendio (65-63) para un Barça en el que permaneció inédito Thomas Heurtel. Ya es hora de que alguien explique sin ambages qué pasa con el francés. ¿No les parece?
Lejos de sentenciar el partido, Kuric falló tres triples, Calathes uno y Mirotic dos tiros libres mientras los israelís se acercaban a un solo punto anotando desde la línea (67-66 a 1:28 del final).
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Un 'dos más uno' que solo aprovechó en parte Hunter dio la vuelta al electrónico a 13 segundos del final (67-68).. y así acabó todo. Derrota más que evitable ante un rival inferior.