Aún no ha dado comienzo la Eurocopa y ya tenemos el primer lío. Lo protagonizó Francia, con tres protagonistas claros: Giroud, Mbappé y el mediador Deschamps. Todo ocurrió en el duelo amistoso ante Bulgaria, donde el delantero del Chelsea anotó dos goles entrando desde el banquillo. Tras el partido, atendió a los medios y no se mordió la lengua y lanzó un par de indirectas que iban dirigidas al crack del PSG.
Giroud felicitó a los dos compañeros que le asistieron en los dos tantos y se quejó de que nadie, en toda la segunda parte, fue capaz de darle un solo balón para combinar, en clara alusión a la figura de Mbappé. Pero ahí no acaba todo.
'L'Équipe' asegura que otro de los focos del conflicto alcanzó también la figura de Benzema. De forma indirecta, eso sí. Y es que según el del Chelsea, Mbappé había estado durante toda la primera parte combinando con el jugador del Madrid hasta que salió él al campo, donde empezó ya a hacer la guerra por su cuenta.
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El crack del PSG salió caliente de la bronca entre compañeros y, siempre según la información, se decidió a convocar una rueda de prensa para dar su opinión sobre el suceso y responder a Giroud. Por suerte para la selección francesa, fue entonces cuando Deschamps tiró de talante y paró a Mbappé. La bronca no fue a más. Veremos si es el único conflicto que hay en un combinado de muchos 'gallos'.