El central del Barça hizo todo lo que pudo para intentar que Chiellini no adelantara a los italianos en el marcador, hasta el punto de ser el único futbolista de la 'Roja' que intentó hacerse con el rechace de De Gea después del tremendo saque de falta de Eder que dio pie al 1-0. El resto de integrantes de la barrera española se quedó mirando la acción desde la distancia, y nadie tuvo capacidad de reacción para seguir la jugada.
El 1-0 dejó en evidencia a la retaguardia de los de Vicente Del Bosque, pues Italia llegó con tres hombres al rechace de De Gea -Giaccherini fue el primero en tocar el balón antes de que Chiellini marcara a placer-, ante la impotencia de la zaga española. Piqué, solo al borde del área pequeña, no pudo hacer más.
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De nuevo, el '3' del Barça volvió a ser un puntal imprescindible en la defensa de una España que se vio desbordada por el ímpetu, velocidad y los temibles contragolpes de su rival.