España acudió al Eurobasket con un equipo nuevo, sin las vacas sagradas que le dieron tantos éxitos en el pasado. Sus aspiraciones parecían limitadas. Pero a la hora de la verdad han dado la campanada clasificándose para la final de esta noche contra Francia.
El merito del seleccionador, Scariolo, es extraordinario. Con juventud, ilusión y pasión ha construido un equipo nuevo que ha superado todas las expectativas. La medalla de plata ya la tienen, hoy lucharán por el oro.