Es pronto para extraer conclusiones. Aunque, bien es cierto, que los números no engañana. Transcurridas las primeras cinco jornadas bajo la tutela de Pablo Machín, el Espanyol ha sumado tres puntos. Los logrados en el Ciutat de València ante el Levante. El resto, cuatro palmatorias ante adversarios, eso sí, importantes. Los blanquiazules se han medido a Villarreal, Valencia, Athletic de Bilbao y Atlético de Madrid. Cuatro rivales muy importantes y ante los que se podía haber arañado algún puntito más. Especialmente frente al Valencia y Atlético de Madrid, donde los blanquiazules se adelantaron en el marcador pero, por diversos motivos, acabaron cediendo los tres puntos. La desconexión en la última media hora frente a los che fue de órdago. Después de firmar un arranque de encuentro imponente, los blanquiazules bajaron los brazos.
En el Metropolitano, tres cuartos de lo mismo. En Canillejas, no obstante, el VAR tuvo un criterio dispar con ambos contendientes, lo que acabó crispando más a una plantilla necesitada de diazepam.
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El oasis europeo no empaña que las cifras en el campeonato doméstico son paupérrimas a estas alturas de la película. A pesar de la entidad de los oponentes, David Gallego firmó cuatro puntos en sus cinco primeras semanas al frente del Espanyol. Empate en Mendizorroza y triunfo de casta en Ipurua. Una unidad más de la que ha sumado Pablo Machín transcurridos los mismos encuentros. Urge empezar a sumar de tres en tres. Y nada mejor para ello que el amparo de los tuyos. Los pericos vuelven al nido. El RCDE Stadium debe ser inexpugnable otra vez.