Los penaltis dieron el pase al Tottenham en los octavos de final de la Carabao Cup. En un duelo con una parte para cada equipo, Mason Mount falló el penalti decisivo en la tanda. Los ‘spurs’, que estaban más centrados en el duelo de mañana ante el Maccabi Haifa para acceder a la fase de grupos de la Europa League, aguantaron los primeros 45 minutos, empataron en la segunda mitad y accedieron a la siguiente ronda desde el punto de penalti. Todo muy Mourinho.
Y es que el técnico luso fue uno de los protagonistas del partido al tener sus más y sus menos con Lampard en la banda durante el primer periodo. Una primera parte en la que el Chelsea mandó y abrió la lata por medio de un Werner que se estrenó como goleador ‘blue’, pero en la que las mejores acciones fueron visitantes.
Al ataque con premio
Así fue como salió el Tottenham en la segunda parte, con el debutante Reguilón a punto de marcar ante otro jugador que disputaba sus primeros minutos con su nuevo equipo, un Mendy que le ganó la partida bajo palos a Kepa.
Los de Mou giraron las tornas tras el descanso y pasaron a dominar el encuentro, hasta el punto de que Lamela igualó la contienda en la recta final tras centro de Reguilón que ningún defensor visitante acertó a despejar. En la tanda de penaltis, los ‘spurs’ estuvieron más acertados.
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La imagen curiosa del duelo fue la de Mourinho yendo a buscar al vestuario a Dier mediada la segunda mitad. El central del Tottenham tuvo que retirarse al sufrir un apretón, sufriendo una ocasión clara en contra los ‘spurs’ sin él sobre el verde. Ello propició que Mou saliera disparado a la caseta a buscar al defensor. Cosas de un entrenador que nunca deja indiferente.