La gimnasta catalana Marina González, natural de Malgrat de Mar, conquistó para la delegación española el oro en el ejercicio de suelo de la 'FIG World Challenger Cup', competición celebrada este fin de semana en la ciudad húngara de Szombathely.
Marina González, de 16 años y que desde hace dos vive en el CAR de Madrid como deportista de élite, obtuvo una puntuación de 12,866 puntos, imponiéndose a la británica Emily Thomas y a la ucraniana Angelina Radvilova.
Este oro en la prueba de la Copa del Mundo se une a los éxitos tanto individuales como colectivos que ha obtenido durante 2019. Marina se proclamó subcampeona de España absoluta individual de la máxima categoría (Nivel 10 Elite Olímpica) en el campeonato celebrado en Valencia, siendo plata en barra de equilibrios y ganando la medalla de oro por equipos, defendiendo los colores del Salt Gimnàstic Club, probablemente una de las entidades que mejor labor hace con la cantera.
Igualmente, en este 2019 ganó el Campeonato Nacional Liga Iberdrola de 1ª División con el Salt GC de Girona. Un año perfecto que le ha servido para quitarse el mal sabor de boca que le dejó la grave lesión de codo sufrida el año pasado antes de acudir a los Juegos del Mediterráneo y de la que ha tardado casi diez meses en recuperarse al cien por cien.
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Como recompensa, y gracias a sus méritos, Marina ha sido seleccionada por la Real Federación Española de Gimnasia Artística para participar en el XLIX Campeonato del Mundo de gimnasia artística que se celebrará del 4 al 13 de octubre en Stuttgart (Alemania) y que sirve como torneo preolímpico para clasificarse para los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020. Una cita, por lo tanto, clave para la gimnasia española que lleva varios ciclos olímpicos sin clasificarse.