El Nápoles se impuso por la mínima a la Lazio en San Paolo gracias a un solitario tanto de Insigne y se convierte en el primer equipo italiano clasificado para las semifinales de la Coppa de Italia. Los partenopeos estuvieron más acertados que su rival en un encuentro que se jugó diez contra diez durante una hora y esa circunstancia marcó la diferencia, así como los dos goles anulados al conjunto dirigido por Simone Inzaghi.
No habían tomado asiento todavía los espectadores en San Paolo cuando el Nápoles puso tierra de por medio en el marcador. En un arranque de partido de locos, Insigne adelantó a los partenopeos. El menudo delantero italiano dejó sentado a su par dentro del área con dos recortes preciosos y superó a Strakosha colándole el balón entre las piernas.
Los fuegos de artificio iniciales, sin embargo, no acabaron ahí. Así lo quiso Hysaj, que cometió primero un penalti tonto sobre Caicedo y después se autoexpulsó con una entrada todavía más absurda en el intento de frenar una contra del equipo de Inzaghi. Entre medias, Immobile había desperdiciado el lanzamiento desde los once metros a favor de la Lazio, que siguió tirando piedras contra su ventana. Tanto es así, que en el ecuador del primer acto Leiva vio dos cartulinas amarillas seguidas en cinco segundos, la última por protestar al árbitro, y se volvieron a igualar las fuerzas después de un pequeño arreón lacial. El sacrificado fue el debutante Lobotka (fichado del Celta), quien dejó su lugar en el campo a Luperto.
Dos goles anulado a la Lazio
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Tras el descanso, quiso masticar el partido el Nápoles hasta tenerlo triturado pero se equivocó de plan. Salvaron el cuello los de Gatusso porque les bajó la virgen a ver hasta en tres ocasiones: primero cuando el colegiado anuló un gol a Immobile por un fuera de juego milimétrico, después cuando el ex del Sevilla estrelló un balón en el palo y por último en otro tanto anulado a la Lazio por posición antirreglamentaria de varios jugadores en segunda jugada tras un saque de esquina. Esta vez la suerte se alió con el más fuerte.