En 1913, tal y como sucedió en 1910, el Campeonato de España se dividió en dos torneos diferentes. Uno, organizado por la Federación Española de Clubes de Fútbol, se celebró en Madrid y fue ganado por el Racing de Irún. El otro, organizado por la Real Unión de Clubes, se lo llevó el FC Barcelona.
Iban a participar muchos equipos, pero al final solo fueron tres: Real Sociedad, Sporting de Irún y FC Barcelona. Los dos primeros se enfrentaron en una fase previa que dominaron ampliamente los donostiarras. Eso les permitió luchar por el título en un doble duelo con el Barça en el Camp del Carrer Industria y que se iba a decidir por sistema de puntos.
Ninguno de los dos equipos fue capaz de vencer al otro en la final. Los dos empates cosechados –empates a dos y a cero- propiciaron que hubiera un tercer choque de desempate. En el primero de ellos, la Real Sociedad se adelantó en el marcador por medio de Arrillaga, pero el Barça reaccionó en la segunda mitad por medio de Forns y Apolinario. Solo un gol de Artola en el último minuto evitó el triunfo azulgrana.
En el segundo duelo, disputado al día siguiente con poca afluencia de público al ser un día laborable, no fue un buen partido y ni unos ni otros consiguieron inaugurar el marcador, con lo que todo se tuvo que decidir en un tercer choque.
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En ese partido el FC Barcelona se llevaría, no sin esfuerzo, su tercer título de Copa. Tras un gol inicial de Rezola de penalti -muy protestado por el público presente en la calle Industria-, los azulgranas remontaron gracias a los goles de Berdié y Apolinario y conquistaron su tercer título de Copa, que acabaron celebrando, junto a los jugadores rivales, con un banquete en el restaurante Royal.