Con el partido 0-0 y el Barça atacando en campo del Real Madrid, Vinicius intentó llevar algo de peligro a la portería de Ter Stegen... pero terminó en un piscinazo. El extremo brasileño mostró sus mejores dotes de teatro y cayó pidiendo penalti.
Fue en una jugada individual en la que superó la amrca de Mingueza en la banda, intentó adentrarse al área y sintió la presión de Óscar en la espalda. Inmediatamente, Vinicius buscó caer al suelo para provocar la sanción de Sánchez Martínez, que decidió que la jugada siguiera ante los reclamos de los jugadores merengues.
NOTICIAS RELACIONADAS
La pelota salió del campo y el VAR entró a analizar, corroborando que el brasileño se había marcado un piscinazo de película. Ahora eran los del Barça los que le reclamaban al árbitro para amonestarle por su simulación, pero Sánchez Martínez le perdonó la amarilla.