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La dura derrota del Barça en el clásico en Madrid este sábado significa un duro palo a las aspiraciones ligueras de los futbolistas de Ronald Koeman.
Este clásico se trataba del primer clásico en el que asistía Joan Laporta como máximo dirigente en su segunda etapa presidencial, justo once años después del último que había vivido como presidente.
Joan Laporta estuvo en el palco de Valdebebas acompañado de Florentino Pérez y los otros dirigentes culés y merengues y, tras el partido, quiso mandar ánimo a la afición culé, con un mensaje de optimismo hacia el tramo final de la competición.
“Tenemos ocho partidos por delante para conseguir el objetivo de ganar la Liga. No tengo ninguna duda de que el equipo luchará hasta el final. ¡Visca el Barça!”, escribía Laporta, en catalán, castellano e inglés.
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Laporta está convencido de que los jugadores lo darán todo en las jornadas que quedan de la competición liguera, y considera que pueden sacarlo adelante, pese a que actualmente sean terceros en la clasificación, aunque a tan solo un punto del Madrid y Atlético, con un partido menos.