Bravo, bravo y bravo. El guardameta chileno ha demostrado en el Madrid - FC Barcelona del Bernabéu que es y tiene que ser el portero titular del FC Barcelona. En el Clásico, cuando los focos estaban puesto sobre Keylor Navas, Claudio Bravo llegó de puntillas y salió a hombros.
No tardó en sacar una buena mano en los primeros diez minutos después de que Cristiano dejase sentado a Mascherano. Evitó el primer gol al desviar el centro del portugués que esperaba Benzema con muchas ganas.
James se topó en dos ocasiones con el chileno. Una en el minuto 27 y otra justo después del descanso, en el 48. Muy importante esta última ya que no solo desbarató el trallazo del colombiano, si no que rompió la dinámica de un Real Madrid que buscaba el 1-2, como puedes ver en este vídeo resumen del Real Madrid - FC Barcelona.
La más vistosa fue el uno contra uno que le sacó a Cristiano Ronaldo en un contragolpe. El portugués se quedó solo contra él tras un pase de Bale y Bravo se hizo muy grande.
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Hubo más, no es cuestión de nombrarlas todas. La cuestión es que Bravo es un portero 10. Con calma, sensatez y mucha determinación. Muchos son los que piensan en su edad. Otros, simplemente, disfrutan.