Ralf Rangnick dio paso a la cantera en la última jornada, y casi acaba viendo como el Young Boys consigue su primera victoria europea a domicilio del curso. El Manchester United empató contra el conjunto suizo para cerrar la fase de grupos, en un resultado que no les discute el liderato y que apea definitivamente al conjunto de David Wagner de aspirar a la tercera plaza.
El nuevo técnico del United cambió a todo su once respecto al fin de semana. Ronaldo, Bruno Fernandes o De Gea no fueron ni convocados, pero quedó el camino libre para Greenwood. Ubicado como referencia en ataque, la joven perla inglesa se reivindicó ante su nuevo técnico con un tanto de chilena antes del minuto 10. Fue la nota más positiva de un partido que pasará sin pena ni gloria en el Teatro de los Sueños.
La igualada llegó antes del descanso tras un error de Van de Beek. El holandés, ubicado como único pivote defensivo del United, perdió la posesión en salida de balón, y el visitante Riedler decidió recogerlo y guardarlo en la escuadra de Henderson. Los mancunianos han sido incapaces de dejar la portería a cero en los últimos cinco partidos de Champions disputados en su feudo.
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En la segunda mitad Rangnick dio entrada a cuatro canteranos más, y las mejores llegadas estuvieron a los pies del Young Boys. En ninguna de ellos acertaron, y con su falta de puntería murieron sus opciones de seguir en Europa esta temporada.