Marc-André ter Stegen no deja indiferente a nadie. No lo hizo a lo largo de su primera temporada como azulgrana y tampoco lo está haciendo en lo que llevamos de curso. De hecho, su situación ha ido a más tras algunos errores cometidos durante los primeros meses de competición.
Dejando de lado que el internacional alemán ha recibido por todos lados y, probablemente, de forma algo injusta, lo cierto es que la suerte le ha dado la espalda desde que pasó a ocupar la portería de forma fija tras la lesión de Claudio Bravo.
Este martes no fue una excepción. Su actuación ante el Bayer Leverkusen resumió lo que está viviendo este curso. Encajó el tanto de Papadopoulos tras fallar en la salida en un saque de esquina pero volvió a resultar decisivo en posteriores intervenciones.
Pese a que parecía tocar fondo al discutir airadamente con Luis Suárez después de encajar el 0-1 en el que no se entendió con Mathieu, Ter Stegen se sobrepuso para salvar su portería con algunas intervenciones de mérito, como al aguantar la verticalidad ante un disparo cercano de Bellarabi tras recortar sobre Piqué.
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Ter Stegen acabó firmando dos buenas intervenciones en el primer tiempo para evitar un 0-2 que habría hecho mucho daño y volvió a ser decisivo en la segunda mitad salvaguardando su portería y haciendo posible la remontada final. Es de justicia recordar sus fallos y también sus aciertos, tal y como hizo la grada del Camp Nou al aplaudir al alemán en el segundo tiempo.