Han pasado tres años desde que Motta jugara su último partido en el Camp Nou. Fue entonces cuando el Inter de Mourinho se cruzó en el camino del Barça a la final del Bernabéu. El Barça tenía la misión de remontar la desventaja cosechada en el Giuseppe Meazza pero finalmente el 'catenaccio' empleado por Mourinho hizo imposible la clasificación.
En aquel partido Motta volvía al Camp Nou y acabó convirtiéndose en protagonista indirecto del partido. Al borde del descanso, su agresión a Busquets provocó su expulsión, una tangana que caldeó el ánimo y el encierro descarado de los 'neroazzurri' en inferioridad númerica.
Sergio Busquets sacó a Motta de sus casillas y desde entonces no han vuelto a cruzarse en un partido de clubes. En la Eurocopa 2012 sí se vieron las caras en la primera fase de grupos en el encuentro que enfrentó a España e Italia y que acabó en empate a uno. Busquets disputó todo el encuentro y Motto fue sustituido en el último minuto por Nocerino. Más tarde se reencontrarían en la gran final aunque Motta fue suplente y acabó lesionado a los diez minutos de salir al campo en la segunda parte.
Precisamente esa lesión le impidió medirse al Barça en el amistoso veraniego que enfrentó al PSG con el conjunto azulgrana a principios de agosto.
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Ahora, Motta tendrá la oportunidad de volverse a cruzar con su pasado, el Barça y Sergio Busquets. La baja por sanción de Matuidi abre las posibilidades en el centro del campo del PSG donde el propio Motta tiene todos los números de salir de inicio junto a Verratti y Beckham o Chantome.