El FC Barcelona fraguó su pase a la fase final de la Champions gracias una soberbia actuación de Leo Messi en la primera mitad del partido ante el Nápoles. El 10 azulgrana marcó un gol de antología, pero también dio el susto y acabó muy tocado, tras una dura entrada de Koulibaly. Pese a que Leo salió en la segunda mitad, su rendimiento bajó muchos enteros y su imagen renqueante dejó preocupados a los aficionados blaugranas.
Messi tenía el pie hinchado después del golpe. Tras el partido, el argentino sentía dolor y tenía inflamada la zona, aunque desde el club apuntan que solo se trata de una contusión y confían en que con un poco de descanso, estará en perfectas condiciones para abordar el desafío de cuartos de final de la Champions ante un Bayern Múnich que está intratable.
Quique Setién quiso tranquilizar a los culés y dejó claro que podrá contar con Messi en Lisboa: "Tiene un golpe fuerte, lo he visto bien. Habrá que tratarlo pero no creo que haya problema para que pueda jugar", afirmó el entrenador cántabro en la rueda de prensa posterior a la victoria sobre el Nápoles.
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Los médicos ha iniciado un tratamiento de recuperación a base de antiinflamatorios y Messi tendrá que hacer reposo antes de incorporarse a los entrenamientos, en principio el martes o el miércoles.