Cuando peor lo estaba pasando el Real Madrid, los blancos encontraron oxígeno. Isco Alarcón, que ha conseguido ser clave en el esquema de Zinedine Zidane, adelantó a los locales tras una acción muy desafortunada del Manchester City, que encadenó dos errores determinantes para encjar el gol.
Y eso que los de Pep Guardiola estaban inclinando la balanza a su favor, con acciones de gol muy claras en el inicio de la segunda mitad, sobre todo en las botas de Mahrez. Pero a la hora del partido llegó la jugada que puede marcar una eliminatoria. Modric robó el balón en el centro del campo y se la pasó a Vinicius. El brasileño, muy desafortunado en las acciones de remate, sí acertó con la asistencia y le ganó la partida claramente a Walker, que se vio sorprendido por su velocidad. El balón le llegó muy diáfano a Isco, que con la derecha batió por raso a un Ederson que se quedó a media salida y nada pudo hacer.
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Es la tercera 'diana' del de Arroyo de la Miel esta temporada, la primera en la Champions League. También marcó en Liga en el feudo de Osasuna y en la Supercopa de España ante el Valencia.