El Liverpool se impuso al Atlético de Madrid en el Wanda por 2-3 en la tercera jornada de la fase de grupos de la Champions League. A pesar del partido, repleto de goles y acciones destacadas, como la expulsión de Griezmann por una dura entrada a la altura de la cara de un rival, uno de los detalles más curiosos del encuentro fue la no encajada de manos entre los dos técnicos, Simeone y Klopp.
Ambos se expresaron en rueda prensa, pero con explicaciones muy alejadas. Empezó Simeone, quien afirmó que: "Yo nunca saludo después del partido, porque no me gusta, no es saludable ni para el que gana ni para el que pierde. Yo lo pienso de esa manera. Pero ahora cuando lo vea lo saludo sin problema".
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El técnico alemán, por su parte, también quiso quitarle hierro al asunto, pero se mostró más sorprendido: "No estaba enfadado para nada. Quise chocar su mano, él no quiso, estaba corriendo hacia el vestuario. Es una persona emocional y yo también. Ahora sí estoy enfadado por tu pregunta".