El Dortmund golea en el triste epílogo de Lopetegui

Los 'borussers' se impusieron por 1-4 en un duelo marcado por el adiós del técnico tras 170 partidos en Nervión

El Sevilla mereció más pero sus errores atrás y la falta de efectividad arriba le lastraron. Partidazo de Bellingham

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El Dortmund se lleva la victoria con 4 goles a 1 al equipo de Lopetegui / TELEFÓNICA

Roger Payró

El último baile de Julen Lopetegui terminó de la peor forma posible. Tras 170 partidos, derrota dura contra el Borussia Dortmund en casa (1-4) que deja al cuadro hispalense con opciones muy complicadas de pasar a octavos. Si lo logra, ya será con Jorge Sampaoli en el banquillo, que lleva unas horas esperando el cese del técnico guipuzcoano. Situación kafkiana en Nervión.

Respondió la afición en el inicio, llevando en volandas a los suyos como reza el himno. Duró poco. Cambio de juego espectacular de Bellingham con la zurda que Guerreiro mejoró con un control orientado antes de cruzársela a Bono. Justo antes En-Nesyri tuvo una doble ocasión en la que no estuvo certero. El punta se benefició del VAR, que anuló su tarjeta roja tras derribar a Özcan por una falta previa de Adeyemi.

El Sevilla jamás perdió la cara al duelo y gozó de ocasiones para empatar, pero el mazazo lo hizo Bellingham. El inglés se deshizo de un Gudelj claramente superado en el partido y definió con el exterior ante Bono. Poco antes había perdonado un claro ataque el cuadro ‘borusser’, que pese a eso tuvo más efectividad que su rival. Dos minutos después, la sentencia. Brillante acción de Moukoko que solo Bono abortó. El rechace, a los pies de Adeyemi, fue un regalo para el 0-3.

El marcador era muy duro e injusto para los de Lopetegui, que murió matando. Doble cambio en el descanso que reactivó a los suyos de nuevo. Nada más arrancar el segundo tiempo En-Nesyri cabeceó a la red para ilusionar a una afición que vio cómo los suyos seguían sin ser contundentes. Como en la primera, no se concretaron y el Dortmund puso la puntilla.

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Brandt aprovechó el enésimo despiste defensivo de la zaga hispalense y cabeceó a la red un envío de Moukoko. Malen perdonó el quinto y Dolberg no acertó después, con un balón al larguero aunque habría sido anulado por fuera de juego. El duelo terminó con la afición coreando a Julen Lopetegui y señalando a la grada. Los más felices, los 1.800 aficionados ‘borussers’.

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