A la tercera fue la vencida. El cuadro ‘giallorosso’ estrenó el casillero de victorias en Serie A gracias a un golazo de Pedro Rodríguez que decantó la balanza ante el siempre rocoso Udinese. El canario debutó como realizador romanista con un derechazo desde la frontal que pegó en la cruceta antes de batir a Musso.
El zapatazo del canario decidió un partido muy parejo. El primer acto fue para la Roma, un guión fiel a todos los pronósticos. El Udinese esperaba en campo propio con las líneas muy pegadas, sin dejar espacios. Y la iniciativa ofensiva era capitalina, con paciencia pero sin excesiva fluidez en los últimos metros.
Aun así, las pocas ocasiones antes del descanso fueron para la 'Loba'. Dzeko mandó a las nubes un mano a mano y Musso atajó con solvencia un tiro lejano de Mkhitaryan. El único intento 'friulani' antes de la pausa, un zapatazo de Lasagna que Mirante palmeó a córner. La dinámica del partido viró 90 grados tras el tanto de Pedro en los compases iniciales del segundo tiempo.
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El Udinese dio un paso al frente, decidido a empatar el encuentro. La Roma titubeó y se encerró en su propio campo. Es ahí donde más sufre el cuadro 'giallorosso', con una clara tendencia a los desajustes defensivos. Y aunque la zaga mostró sus habituales lagunas, un Mirante gigantesco evitó con sus reiteradas intervenciones la igualada del Udinese. Lasagan, Okaka y Ouwjan se estrellaron contra el arquero. Respira aliviado Paulo Fonseca, que ya sabe lo que es ganar en la presente Serie A.