El fútbol es un deporte de fallos, y el 'Derbi de Italia' estuvo plagado de ellos. Al final, el Nápoles agradeció los de su archinenemigo juventino para acostarse en lo más alto de la tabla. Politano y Koulibaly remontaron el 0-1 de Álvaro Morata.
La melancólica ‘Signora’ aligeró sus males con el derbi en pañales. Morata achuchó a Manolas, forzó el vergonzoso error del heleno y acarició el balón para superar a Ospina, todavía con ‘jet lag’ tras sus compromisos con Colombia. Spalletti mascullaba para sí. El Nápoles se diluyó en su propia propuesta y acabó noqueado por la Juventus de toda la vida, que no necesitó el balón para infundir pánico en el Maradona. Sólo Politano funcionó por los ‘partenopeos’. Partiendo desde la derecha pisó área y dio faena al tándem Bonucci-Chiellini.
La segunda parte piamontesa no pudo ser más decepcionante. Los ‘bianconeri’, maltrechos por las ausencias, quedaron ensombrecidos por el empuje ‘azzurro’, que pronto encontró premio. Insigne buscó la comba desde la frontal y Szczesny, que quiso lucirse con una palomita, se la dejó a huevo a Politano, que empujó por debajo del portero polaco.
NOTICIAS RELACIONADAS
Y el partido de los errores culminó su obra con otro inverosímil de Moise Kean. El delantero remató contra su propia portería un servicio desde la esquina, obligando a Szczesny a regalar el 2-1 a Koulibaly. Pintan bastos en Turín.