El Inter de Milán sumó su cuarta victoria consecutiva en la temporada, igualando el inicio perfecto que disfrutó hace dos temporadas (llegó enlazar cinco triunfos) y presentó su candidatura a un Scudetto que celebró por última vez en 2010, bajo el mando de un José Mourinho que condujo al equipo a la conquista del Triplete.
Fue una victoria tan justa como ajustada y que no comenzó hasta el minuto 82, cuando Skriniar solventó una jugada con muchos rechaces y errores, y que cerró en el 92 Perisic, con el Crotone desesperado por igualar y arrodillado a la contra, rendido frente a la mejor calidad del Inter.
El equipo de Spalletti, eso sí, se encontró con un Crotone contestón, que le plantó cara en una primera mitad que acabó sin goles porque el Inter perdonó en dos ocasiones, la más clara en un robo de Borja Valero y que desembocó en un excelente contragolpe que Joao Mario no supo culminar, rematando demasiado cruzado.
Alcanzó el descanso con 0-0 el Crotone y confiado en frenar la solvente marcha del líder se echó atrás en una segunda mitad cada vez más dominada por el Inter, al que la entrada de Nagatomo ofreció más profundidad y dominio, sin suerte, eso sí, hasta que que a fuerza de rebotes la encontró a través del central eslovaco.
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Después, ya en tiempo añadido, marcó Perisic cuando soñaba el Crotone con igualar en esos siete minutos de alargue. Y se acabó todo.