Genoa y Milan disputaron el segundo partido de la semana. El primero llevan horas realizándolo con Piatek como protagonista. Y es que ambos clubes siguen ultimando el acuerdo gracias al cual el delantero polaco, que no jugó por sanción, vestirá de 'rossonero'. Higuaín también fue uno de los nombres propios en los prolegómenos del encuentro. El 'Pipita' tampoco jugó ni un solo minuto. De hecho no estaba ni convocado. Gattuso prefiere tenerlo apartado en vistas a un próximo traspaso al Chelsea.
No obstante, vamos al fútbol. Sobre el terreno de juego, que es donde se ganan los partidos, Borini y Suso ajusticiaron a un Genoa (0-2) que echó mucho de menos la figura de Piatek, clave en ataque. El Milan tuvo que remar para llevarse la victoria del Luigi Ferrari. No es fácil ganar en ese estadio y el cuadro de Gattuso lo consiguió con mucho esfuerzo, teniendo en cuenta que en la primera parte no fue el gran dominador.
El Genoa salió mejor del túnel de vestuarios y sin tener la posesión gozó de buenas oportunidades para marcharse al descanso con un resultado favorable. Pero le faltó la pegada de Piatek. Biraschi, Bessa, Pandev y hasta Kouame tuvieron oportunidades más que claras pero Donnarumma decidió repeler cualquier intentona. El Milan, con la posesión, tan solo tuvo una de Paquetá que se estrelló en la madera cuando ya se cantaba el gol.
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Cuando tienes muchas ocasiones y no las materializas pasa lo de siempre. El Milan salió algo mejor en la segunda mitad y acabó de sentenciar el encuentro. Paquetá volvió a avisar y Borini movió el marcador. El italiano aprovechó un centro de Conti para desatar la alegría de los de Gattuso. Tras el tanto, el Genoa se fue descaradamente al ataque y Suso finiquitó cualquier esperanza. El internacional español convirtió una buena contra con un disparo cruzado con su pierna menos buena. Meritoria victoria del Milan ante un Genoa debilitado.