Qué fácil lo hace el Bayern incluso en los días en los que no está fino. El Mainz, penúltimo de la Bundesliga, llegó al Allianz con piel de cordero. Lejos de lo que se esperaba, llegó a ponerse 0-2 y con Neuer salvando dos claras para hacer más daño. Pero tras el descanso, los de Flick esta vez sí penalizaron sus llegadas y el bombardeo fue imparable. ‘Manita’ y a otra cosa.
No es nueva esta sensación para los bávaros de tener que remar a contracorriente. Son ocho partidos seguidos en los que el rival se le adelanta pero no terminan perdiendo. Y ante el Mainz volvió a vivirlo El partido fue un festival ofensivo. Si hubiera acabado 8-4 a nadie le habría sorprendido. Burkardt obligó a lucirse a Neuer y la reacción del Bayern fueron las llegadas de Sané, Gnabry y Tolisso en dos veces.
Nadie podía besar la red. El Mainz empezaba a achicar agua atrás pero de tanto que aprieta el Bayern sus espaldas suelen ser vulnerables. Y ahí se puso las botas el elenco de Jan Siewert. Burkardt castigó a un endeble Boateng en un balón largo de Latza y sentenció ante Neuer. Lewandowski tuvo el 1-1 pero Dahmen, hoy debutante a sus 22 años, le negó el tanto. Repitió Neuer ante Quaison pero no con Hack en la última de la primera mitad.
Ritmo frenético
Lejos de encerrarse, el Mainz siguió buscando hacer daño y entre Neuer y el palo salvaron el 0-3 de Latza. Pero esta vez el Bayern ya no le daría más opciones a su rival. Kimmich inició y terminó él mismo una gran jugada en el 50’ y apenas cinco minutos después Sané se marcó un eslalon con disparo final en el balcón del área que puso el empate en el electrónico.
El larguero salvó esta vez el 2-3 de Quaison. El ritmo era frenético y el Bayern llegó a voltear el duelo. No con un tanto de Barreiro en propia por fuera de juego de Davies en el inicio pero sí con un remate de Süle, no exento de fortuna al rozar en Fernandes, en un saque de esquina. Ahí murió el Mainz.
NOTICIAS RELACIONADAS
Lo más difícil estaba hecho, aunque faltaba que Lewandowski se apuntara su par de goles. Transformó el primero en un penalti de Barreiro sobre Gnabry –que por cierto se fue cojeando- y cerró la cuenta con un gol de puro delantero centro a pase de Müller. Los bávars mantienen el liderato de la Bundesliga.