Diego Llorente, tajante: "¿Los árbitros? Te mienten a la cara; hay que pegar un puñetazo encima de la mesa"

El Sevilla se llevó el gran derbi ante el Betis gracias a un solitario tanto de penalti que transformó Lukebakio. Sin embargo, en las filas verdiblancas no sentó demasiado bien la derrota. Sobre todo, por la pena máxima que terminó decidiendo el duelo. El colegiado Martínez Munuera no dudó en decretar que las manos de Diego Llorente debían ser castigadas, una decisión que cabreó y de qué manera a toda la plantilla del Betis, que protestó la acción con vehemencia.

Al final, nada hizo cambiar la decisión al árbitro y Lukebakio terminó siendo decisivo para la victoria hispalense. Eso sí, después del partido tocaba hacer valoración de lo sucedido y Llorente, implicado, no se mordió la lengua.

"La verdad es que el penalti... Acabo de ver las imágenes y no entiendo nada, no entiendo nada. Yo las manos las tengo abajo, él dice que las tengo abiertas y en ningún momento tengo las manos en horizontal. Ya no es solo que pite penalti, que es lo que puede interpretar en el campo, pero que el VAR no le llame y encima le diga que tengo las manos así es faltarnos al respeto, es lamentable la verdad", comentó.

"Se retratan ellos solos"

Y no se quedó ahí: "Los árbitros llevan ya un tiempo con el VAR, no hay excusas, y al final se retratan ellos solos. Las explicaciones que hemos visto todos por televisión son mentira. Ya no es sólo que lo pites sino que encima te están mintiendo a la cara, es inexplicable para mí. Tenemos que hacer autocrítica pero hay que dar un puñetazo encima de la mesa porque el otro día contra Las Palmas le pegan un rodillazo en la cabeza a un compañero antes de tocar el balón y es penalti también. Entonces, creo que ya nos vale, aquí luchamos cada semana para que cuando haya jugadas, por lo menos vayan a verlas al VAR, que para eso está, es una herramienta que está para eso".

Declaraciones durísimas del central del Betis que veremos qué respuesta tienen por parte del estamento arbitral. Recordemos que ya ha habido sanciones por hablar mal de los árbitros y con palabras menos agresivas.