Malcom no ha jugado ni 90 minutos con su nuevo equipo, el Zenit de San Petersburgo y ya hay aficionados que desean su salida. De hecho, recientemente se ha conocido como un grupo de fanáticos radicales del Zenit mostraron una pancarta en el debut del brasileño en contra de su firma, debido a su color de piel.
La pancarta racista podía leer: “Gracias a los líderes por su fidelidad a las tradiciones”, en referencia a un comunicado anterior que este grupo de radicales pedía al club no contratar a jugadores de color: “Para nosotros la ausencia de jugadores negros es solo una tradición, no somos racistas”.
Tras hacerse eco de la noticia, el medio ruso Sport.ru desvela que desde la cúpula del club ya estarían pensando en tomar alguna medida al respeto. De hecho, la medida que se plantea el Zenit de San Petersburgo es vender al jugador brasileño ex del Barça este mismo mercado de invierno si la situación con el público ruso no mejora.
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El Zenit pagó 40 millones al Barça por el jugador más cinco posibles en variables. Si su relación con los radicales del Zenit no va a mejor, el club le buscaría un nuevo destino para enero.