No es ningún secreto el hecho de que Ousmane Dembélé está viviendo sus mejores tiempos desde que fichó por el Barça. El extremo de Vernon ha recuperado la sonrisa y está más enchufado que nunca, tanto sobre el verde como en el vestuario, después del huracán que se formó en enero. Cuando todo hacía indicar que no iba a enfundarse más la camiseta del Barça, Xavi salió al rescate y decidió contar con él para lo que restaba de temporada. Era un activo del que no estaba dispuesto a desprenderse.
Una vez tomada la decisión, el jugador se sentó ya en el banquillo ante el Atlético de Madrid. El 'castigo' había durado apenas un encuentro, el del desplazamiento a Mendizorroza ante el Alavés. Poco a poco fue entrando el galo, que con el paso de los partidos se ha convertido en pieza imprescindible para Xavi. Ya desde el mismo momento de su aterrizaje dejó claro en sus ruedas de prensa el egarense que Ousmane era vital en su dibujo y que la prioridad del club tenía que ser la renovación. Le iba tirando guantes al galo para que los recogiera. Pero no sonó 'chof'.
En cualquier caso, echando un vistazo al rendimiento de 'Dembouz' desde su fichaje el verano de 2017 las cifras hablan por sí solas. Con su primer técnico, Ernesto Valverde, jugó 74 partidos oficiales en los que marcó 19 goles y dio 15 asistencias en 4.215'. Eso significa un gol o asistencia cada 124 minutos.
Quique Setién relevó al 'Txingurri', pero justo coincidió con una lesión de larga duración (que desembocó en el fichaje de Braithwaite) y no disputó ni un solo minuto Dembélé con el cántabro. Solo se sentó en el banquillo en el famoso 2-8 ante el Bayern en Lisboa.
SUS PEORES NÚMEROS, CON KOEMAN
Llegaba la hora Koeman. La temporada 2020/21 logró tener continuidad el 'Mosquito', pero lo cierto es que sus números empeoraron. 44 partidos oficiales, 11 goles y cinco asistencias en 2.699'. Eso significa un gol o asistencia cada 169'.
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Con Barjuan disputó apenas 25' en el estadio del Dinamo de Kíev sin producción alguna. Ahora llegamos a la era Xavi. Con el egarense en el banquillo acumula 20 encuentros, en los que ha marcado dos goles y dado nueve asistencias en 1.148'. Ergo, un tanto o asistencia cada 104 minutos.