Leo Messi volvió a vivir una experiencia inédita en su carerra deportiva. Leo Messi, pro segundo partido consecutivo, volvió a iniciar un partido de Champions League en el banquillo. Después de ser suplente ante la Juventus, de no jugar el duelo ante el Murcia en la Copa del Rey y de disputar los dos encuentros de la Liga Santander ante el Valencia y el Celta, Messi volvió a estar en el banquillo ante el Sporting de Portugal.
Esta vez, a diferencia de Turín, se trataba del banquillo del Camp Nou, de casa. Y Messi lo aceptó con total normalidad. Leo Messi estuvo distendido en el banquillo, acompañado del entrenador de porteros de la plantilla, José Ramón de la Fuente, de la misma manera que sucedió ante la Juventus. Los dos estuvieron dialogando durante todo el primer tiempo y comentando las jugadas, hasta que en el minuto 46', valverde le ordenó calentar por la banda.
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A diferencia de Turín, que ya calentó en el descanso, Leo Messi empezó a calentar junto a Sergio Busquets hasta que se produjo el cambio en el minuto 61' de juego. Leo Messi sustituyó a Aleix Vidal. Su presencia en el campo, cambió completamente la dinámica del partido.