Vitor Roque y la 14ª 'barra blaugrana' del Betis

Desde que Lorenzo Serra Ferrer pasó de ídolo del beticismo (1994-97 y 2004-06 con la Copa de 2005 como gran logro) a no terminar la temporada 2001-01 como técnico azulgrana han pasado casi dos décadas marcadas por el continuo trasvase de jugadores entre ambos equipos, más de norte a sur que viceversa.

Tanto, que al igual que se asegura desde la Palmera que Catalunya es "la novena provincia andaluza' cada vez que el Betis juega ante Barça, Espanyol o Girona podría decirse que las famosas '13 barras' verdiblancas podrían tener una añadida de color azul y grana.

El balear no fue el único entrenador que realizó el camino inverso, ya que Quique Setién pasó de la gloria en Heliópolis con el regreso bético a Europa a salir por la puerta de atrás y convertirse en uno de los últimos inventos con gaseosa de Josep Maria Bartomeu.

Vayamos al césped. El extremeño Ángel Cuéllar fue un ídolo en el Betis (1986-95) y una lesión al inicio de su aventura azulgrana lo lastró (1995-97), por lo que regresó a Sevilla (1997-2001). Tres cuartos de lo mismo o peor fue lo del canterano madridista Alfonso Pérez, un ídolo en el Betis (1995-2000 con más de 50 goles) y casi un villano en el Barça (2000-02) antes de volver a un nivel bajo otra vez a la Palmera (2002-05). Antes emprendió el camino norte-sur Ramon Maria Calderé, azulgrana de 1984 a 1988 y bético de 1988 a 1990.

Esos tres ejemplos históricos se han visto multiplicados exponencialmente en los últimos años con una filosofía de juego verdiblanca un tanto similar que primero el caótico Setién y ahora el ‘maestro’ Pellegrini han impuesto en el Villamarín con jugadores 'de toque' como Fekir e Isco.

El cedido Vitor Roque es el siguiente en una plantilla que compartirá con los canteranos azulgranas Héctor Bellerín, el por fin recuperado Marc Bartra, Ez Abde, Rodri y Sergi Altimira (hijo del exmiembro del cuerpo técnico del primer equipo azulgrana Aurel.li). Los otros dos catalanes, Marc Roca y Aitor Ruibal se formaron en el Espanyol y en el Manresa, respectivamente. Y Àlex Collado fue una ‘operación Planas’ que ha vuelto a salir cedido a Arabia.

La pasada campaña vistieron de béticos el marroquí Chadi Riad y el sevillano Juan Miranda, mientras que en la última década se ha visto en el Betis hasta a otros 10  con pasado en La Masia como Martín Montoya, Víctor Ruiz, Cristian Tello, Àlex Moreno, Carles Aleñà, Wilfrid Kaptoum, Tony Sanabria, Xavi Torres, Dani Pacheco y Joan Verdú. Antes, lo hicieron Arpón, Óscar López, Sánchez Jara, José Mari, Mario, Sergio García y Damià.

¿Y el camino sur-norte? No ha sido ni mucho menos tan habitual con la excepción del dominicano Junior Firpo, quien llegó al Barça en 2019 después de ver frenada en la última temporada en el Betis la enorme progresión que mostró en la anterior y dos años después se marchó al Leeds.

Bueno, sin olvidar que tanto Gavi como Fermín tienen pasado en la cantera verdiblanca, que Pinto llegó al Barça 10 años después jugar en el Villamarín. Por no hablar del ‘tema Emerson’, una especie de fichaje compartido que cumplió con nota en Sevilla (2019-2021) y tan solo duró dos partidos en el Camp Nou antes de ser traspasado al Tottenham.