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Ernesto Valverde, entrenador del FC Barcelona, se marchó muy contento de la Nova Creu Alta de Sabadell, a pesar de que su equipo perdiera por 1-0 ante el Girona la final de la Supercopa de Catalunya. Quiso ver el vaso medio lleno: "Este tipo de partidos son para que lo jueguen quienes son menos habituales en el primer equipo, junto a los jóvenes del club. Lo importante es que se ha visto a un Barça reconocible. Era importante tener delante a un rival del potencial del Girona para poder calibrar mejor el rendimiento de los jugadores".
Al técnico azulgrana le gustó que el Girona presentara un equipo con más jugadores de Primera División que su Barça: "En la primera parte jugaron once futbolistas por parte de Girona que perfectamente podrían ser titulares en un partido de Liga, por eso creo que ha sido una buena prueba para nosotros", agregó.
Obviamente el primer nombre propio que salió a colación fue el del joven francés Todibo, que debutó con la camiseta azulgrana... ¡y en el centro del campo!: "Le pusimos ahí porque sabíamos que en las inferiores de la selección francesa ya había jugado en esa posición, Queríamos verle en acción, darle minutos, pero es normal que estuviera perdido porque llevaba mucho tiempo sin jugar. Al final le dolía todo y empezó a tener problemas musculares".
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No dejaron escapar la ocasión para preguntarle por la eliminación del Real Madrid de la Champions League y la crisis que está viviendo: "No es algo que nos tenga que afectar a nosotros en nada. Cada equipo tiene sus propios problemas y sigo viendo al Real Madrid como un rival en el Liga". Añadió al respecto del 1-4 del Ajax que "después de verlo, nosotros tenemos que estar precavidos. El Madrid tenía una ventaja muy buena para la vuelta, mejor que la nuestra, así que está bien recordarlo. Tenemos muchas ilusiones puestas en la Champions", concluyó.