Los diversos errores cometidos en este inicio de curso y la expulsión sufrida en el partido contra el PSV han colmado la paciencia a Ernesto Valverde, que decidió dejar a Samuel Umtiti en el banquillo en el encuentro contra el Girona. Fue su compatriota Lenglet quien ocupó el puesto en el once titular. Umtiti ha tenido un final de la pasada temporada algo irregular, un rendimiento que no ha cambiado durante el inicio del presente curso.
Si bien la presencia de Arthur y Arturo Vidal en el once titular fue motivado a las rotaciones en el centro del campo, la de Lenglet en el eje de la defensa se interpreta como un toque de atención del entrenador vasco a Umtiti por su rendimiento en la presente temporada.
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La renovación de su contrato y el título de campeón del mundo han acabado alterando la tranquilidad del francés que demostró durante el grueso de la pasada temporada. El Barcelona espera recuperar su mejor versión cuanto antes.