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Ni la suplencia de Dembélé sirvió para volver a ver a Adama Traoré protagonista en el Barça. Todo hacía indicar que, tras cinco partidos sin ser titular, llegaría el momento del extremo cedido por el Wolverhampton. Pero nada. Xavi decidió apostar por Memphis para completar el tridente junto a Aubameyang y Ferran Torres. No solo eso, sino que el de L'Hospitalet ni siquiera calentó. Inédito un partido más. Y ya van dos veces en los últimos tres encuentros (tampoco jugó ni un minuto ante la Real Sociedad).
Después de un inicio ciclónico, Adama se ha ido diluyendo y su incidencia en el juego del equipo ha ido cayendo paulatinamente. Algo que, obviamente, ha afectado también a nivel emocional al jugador de origen maliense. De hecho, tras el pitido final del partido ante el Mallorca, se pudo ver al jugador manteniendo una charla con el segundo y hermano de Xavi Hernández, Òscar.
Adama estuvo charlando tras el partido con Òscar Hernández
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Obviamente, el staff técnico es consciente de que el jugador está nervioso, puesto que esa reducción de minutos que ha ido teniendo no es fácil de digerir para nadie. Más aún teniendo en cuenta que está cedido y de que tenía la esperanza de poder ganarse un puesto para el próximo curso. En ningún momento esa opción ha sido fácil, pero sí que en esas primeras semanas y tras su irrupción meteórica, la opción de buscar fórmulas para que continuase estaba encima de la mesa. Un trueque por Trincao (cedido al Wolves) o un cable (otro más) de Jorge Mendes para desatascarlo.
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El caso es que quedan cuatro jornadas y es evidente que actualmente no está entre la lista de preferencias de Xavi. Eso sí, el técnico egarense ha repetido en más de una ocasión que su perfil puede aportar mucho al equipo según el guion del partido y hasta el final lo tendrá en mente como una opción.