Dani Alves entró en las rotaciones de Luis Enrique Martínez en el partido de Liga ante el Getafe. El asturiano quiso darle descanso de cara al partido de este miércoles frente al Arsenal. Sin embargo, el lateral brasileño no descansó ni un segundo en el banquillo azulgrana.
Las cámaras de 'La Sexta' captaron todos los movimientos del jugador durante el partido. Alves se lo pasó como un niño desde una posición en la que no acostumbra a estar.
El jugador, pura energía, fue incapaz de quedarse quieto y seguir el partido como el resto de sus compañeros de banquillo. El lateral se levantaba, se sentaba, se volvía a levantar, se giraba, bromeaba con uno, vacilaba al otro...
El entrenador de porteros del primer equipo, José Ramón de la Fuente, fue la principal 'víctima' de Alves. Especialmente la cabeza despejada del técnico, que recibió varias collejas a lo largo del partido.
También el portero Marc-André Ter Stegen sufrió en primera persona las bromas del brasileño quien hizo ver que iba a darle un puñetazo y en el último momento se pasó la mano por la cabeza. La cara de estupor de Ter Stegen ante el comportamiento de su compañero no tiene desperdicio.
El buen ambiente se contagió en todo el banquillo e incluso Luis Suárez acabó tirando bolas de papel a sus compañeros.
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Así se lo pasaron los jugadores del Barça en el banquillo, donde Alves y su 'show' fueron los protagonistas.