Ronaldinho Gaucho asoció su imagen de jugador del FC Barcelona, donde llegó al cénit del fútbol mundial, a la promoción de su esperpéntico viaje a Paraguay, que ha terminado, por el momento, con el astro en una cárcel de Asunción, donde cumple prisión preventiva junto a su hermano, Roberto de Assis. Ambos entraron el miércoles pasado en el país sudamericano con pasaporte y documentos de identidad locales falsificados, que corresponderían a dos mujeres, que ahora están en prisión domiciliar.
El cartel de la Fundación Fraternidad Angelical es explícito y no deja lugar a dudas: una instantánea de Ronaldinho, con su característica sonrisa, en su etapa como jugador del Barça y a su lado, la empresaria paraguaya, Dalia López, impulsora de la ONG para niños y niñas en situación de vulnerabilidad, ahora huida de la justicia de su país.
A López, que fue quien impulsó el viaje de Ronaldinho, se le acusa de haber sido una de las promotoras de la obtención de la documentación falsa de los hermanos Assis Moreira, algo que los letrados de la empresaria niegan por completo.
Además, la empresaria está siendo investigada desde hace meses por el ministerio de Tributación, el Fisco paraguayo, por un supuesto delito de evasión fiscal de 10 millones de dólares.
Em un principio, Ronaldinho tenía que cumplir una agenda de cuatro días de compromisos publicitarios en Asunción, que incluían desde el lanzamiento de una campaña sanitaria de la ONG Fundación Fraternidad Angelical en territorio paraguayo, a la presentación de una biografía del exjugador y la promoción de la apertura de un casino que será construido en el hotel donde Ronaldinho y su hermano estaban hospedados.
La Justicia paraguaya está investigando quién proporcionó los documentos falsificados, si Ronaldinho y Roberto de Assis pidieron la nacionalidad paraguaya, y cómo todo se tramitó. Este lunes, el escándalo se ha cobrado una nueva víctima, con la renuncia del asesor del ministro de Interior, Rubén Melgarejo Lanzoni.
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Ronaldinho Gaucho, Roberto de Assis y el empresario brasileño, Wilmonde Sousa Lira, están detenidos preventivamente en la Agrupación Especializada, una prisión de seguridad máxima, en Asunción. Mañana, un juez dictaminará si acepta el pedido de los letrados del crack y los hermanos Assis Moreira pasan a prisión domiciliar en Asunción. Y Dalia López, que no ha cumplido con su palabra de entregarse a la justicia, sigue huida en paradero desconocido.