La presencia este miércoles del Barcelona en el Red Bull Arena ha despertado una enorme expectación entre los seguidores del Salzburgo. Para el campeón austríaco es una cita histórica, ya que es la primera vez que se enfrenta al equipo blaugrana a lo largo de su historia. Y para celebrarlo, el club salzburgués ha logrado vender las 29.520 localidades que puso a la venta.
El Red Bull Arena se ha quedado pequeño para recibir al equipo de Ronald Koeman. Será la primera vez desde el inicio de la pandemia que el cuadro blaugrana juegue en un estadio con las gradas repletas de aficionados. Y lo mismo le ocurrirá al Salzburgo.
Eso sí, los seguidores tendrán que acudir al estadio con mucha antelación y con el correspondiente certificado para demostrar que está vacunado, ha superado el COVID-19 o ha dado negativo en un test. Una vez dentro del Red Bull Arena no será necesario la utilización de máscarillas ni respetar ninguna distancia de seguridad.
RODAJE
El Salzburgo llega al partido mucho más rodado que el Barcelona, ya que ya la Bundesliga austríaca ya ha arrancado. Su joven técnico, el alemán Matthias Jaissle, destacó que “la competición comenzará dentro de una semana y media para el Barcelona, lo que significa que probablemente esté muy lejos en su preparación. Esto ofrece a nuestro joven equipo una buena oportunidad para aprender de los mejores y desarrollarse más. También está claro que será un partido diferente al del Atlético. La posesión del balón es muy importante para el Barcelona ”.
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Los jugadores del Salzburgo también están ilusionados. El centrocampista estadounidense Brenden Aaronson dijo que “la expectación es enorme, porque el Barcelona es probablemente uno de los clubs más grandes del mundo. Sabemos que es solo un partido de preparación, pero queremos desafiarlos al máximo".