No deja de ser chocante ver a Joan Laporta para unos días en Ryad con el presidente de la Federación de Fútbol Saudí, Yasser Al Misehal.
No es casualidad ni es la primera vez que se dejan ver estos lazos sospechosos: solo falta recordar el dudoso partido amistoso que el Barça jugó en Arabia en homenaje a Maradona.
Curiosamente, esta fue una directiva que cuando estaba en la oposición se escandalizaba (con toda la razón) con la vergüenza de los acuerdos con Qatar.
NOTICIAS RELACIONADAS
¿Quiere decir que en Oriente Próximo hay dictaduras buenas o malas según sople el viento, o que simplemente solo se trataba de agitar el árbol para asaltar el poder? El silencio en Twitter también es significativo.