Pasan los meses y el segundo amistoso entre el Santos y el Barça sigue parado. En el traspaso de Neymar al conjunto azulgrana, ambos clubes acordaron la disputa de dos partidos amistosos. El primero ya se jugó en el Trofeu Joan Gamper de 2013, pero el segundo parece haberse encallado. Y no por casualidad.
Según informó 'Globoesporte', el conjunto brasileño sigue rechazando ofertas de empresas que se han ofrecido para gestionar el partido amistoso. De hecho, una firma de Dubai mantuvo conversaciones con Barça y Santos al inicio de 2016, pero las negociaciones por una propuesta que rondaba los 2 millones de euros no llegaron a buen puerto.
El Barça está dispuesto a ir a Brasil a disputar el encuentro y, de paso, expandir todavía más su marca a nivel internacional. Diciembre de 2017 podría ser la fecha escogida, aunque el presidente del Santos, Modesto Roma, habría puesto la condición de que el partido se disputara en Vila Belmiro -estadio del Santos-.
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La clave para entender la pasividad del Santos es que el club brasileño percibirá 4.5 millones de euros del Barça en concepto de penalización si no se juega el segundo amistoso antes de 2018, cuando expira el primer contrato de Neymar con el conjunto azulgrana.