Lamine Yamal cumplió 16 años el pasado mes de julio, edad en la que la mayoría de jóvenes futbolistas inician su etapa como juvenil. El de Mataró, un genio precoz, en cambio, ha aprovechado la oportunidad que le ha dado Xavi para tirar la puerta del primer equipo abajo. Parece poco probable que se mueva ya de la primera plantilla.
Su irrupción, de hecho, puso en alerta máxima a las federaciones de fútbol española y marroquí, que, durante las últimas semanas se pusieron en marcha para convencer al jugador para que les representara a nivel internacional. La presión que ha tenido que sufrir Lamine ha sido, en ocasiones, muy exagerada, impropia para un futbolista que, pese a su enorme talento, sigue teniendo solo 16 años y al que están obligando a tomar una decisión trascendental que puede acompañarle durante toda su carrera. Tanto desde Marruecos como desde la RFEF han apretado muchísimo y a través de varios frentes para asegurarse el "sí" del jugador, al que han llegado a incomodar con su insistencia y prisas, para nada aconsejables en una edad tan temprana.
Niños de Rocafonda imitan la celebración de Lamine Yamal
| JAVI FERRÁNDIZNOTICIAS RELACIONADAS
El de Rocafonda ha exhibido mucha personalidad, pero no ha sido sencillo decantarse por uno de los dos países porque, por un lado, ha jugado siempre en las inferiores de España, y, por el otro, se siente muy arraigado al país en el que nació su padre. Sería conveniente que los responsables federativos tuvieran más tacto. Afortunadamente, su carácter tranquilo y una madurez impropia para su edad le han permitido gestionar todo este proceso con entereza.