El blaugrana Carles Puyol vio una cartulina amarilla en el minuto 69 un tanto rigurosa por encararse con Abel Aguilar, después de que el deportivista le diera un balonazo con el juego detenido. El árbitro del colegio andaluz optó por castigar a los dos futbolistas y el defensa del FC Barcelona mostró su desconformidad.
El resto del partido discurrió sin jugadas polémicas o dudosas, por lo que Pérez Montero pasó desapercibido.