El vuelo que llevó a la expedición azulgrana rumbo a Estados Unidos estuvo amenizado con la mejor fiesta posible: la celebración del cumpleaños de Pedro. El extremo canario celebró su 24ª aniversario a bordo del avión con el resto de sus compañeros.
La fiesta no se hizo esperar y tan pronto como se llegó a las 00:00 horas al tripulación sirvió pastelitos para que todo el mundo pudiese felicitar al jugador del Barça. Sin duda, una de las anécdotas de un largo viaje en el que, más tarde, los jugadores azulgranas caerían rendidos.