Que Leo Messi es una leyenda blaugrana es algo incuestionable. Pero las leyendas siempre tienen un inicio. Y el inicio de la leyenda de Leo Messi empezó a escribirse un 21 de marzo del 2011...
Ese noche, con más de 60.000 aficionados en las gradas del Camp Nou el Barcelona se prestaba a recibir al Granada. No era un partido más de Liga. Ni siquiera importaban los 3 puntos en litigio, aunque era importante ganar para dormir a cinco puntos del Madrid.
Esos aficionados que habían acudido al Camp Nou deseaban que su ídolo, que su estrella brillara más que nunca y superara a otra leyenda culé, Cesar y sus hasta entonces imbatibles 232 goles. Una cifra que parecía que nadie iba alcanzar -de hecho nadie más lo ha superado- hasta que un pequeño gran hombre vestido con la camiseta con el 10 y de nombre Lionel saltaba al césped del Camp Nou.
Le bastaba un gol, un solo para igualar el registro de 'El Pelucas'. Pero Messi no se conforma nunca con lo mínimo. Y esa noche, ante el Granada no fue una excecpión. A los 17 minutos de partido, Leo cogió un balón dentro del área y con un disparo cruzado que dio en el palo marcaba el 2-0. No era un gol más. Eara el 232 de su carrera y en el video marcador del Camp Nou aparecieron las fotografias de Messi y Cesar un un enorme 232. Una cifra mágica.
DOS MAS
Pero ya hemos dicho que Messi no se conforma con lo mínimo. Siempre quiere más. Y más, cuando como en ese día el equipo le volvía a necesitar. El Granada había empatado a dos y era obligado ponerse las pilas para seguir en lucha por la Liga.
Y ahí de nuevo apareció Messi. Para marcar. Para hacer más grande su leyenda. Para batir a César. Con un gol. Con un golazo. Con un gol Messiano. Minuto 67 de partido, Leo recibe un pase mágico entre líneas, picha el balón con un suave toque y supera al portero del Granada (Julio César protagonista involuntario) con una vaselina perfecta, eterna. De nuevo en el video marcador la imagen de Messi y otro enorme 233.
Para cerrar esta noche mágica, esta noche de leyenda, Messi marcó otro gol, el tercero, otro hat trick. Faltaban cinco minutos para el final y recogió un balón en profundidad de su amigo Alves y regateó a Julio César para marcar. Y volver a escuchar los gritos de 'Leo, Leo' de una afición entregada a su ídolo, a su leyenda.
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Una afición que sigue tan entregada a Messi como antes. Y es que han pasado cinco años y Messi, el mejor jugador de la historia del Barcelona, ha seguido marcando goles. Tantos que le han permitido doblar la cifra de César. En solo cinco años lo ha conseguido. Fue ante el Manchester City, en otra noche mágica de Messi, en otra noche que anotó un hat trick, cuando consiguió los 465 goles.