El Celta visita este domingo (21.00 horas) el Camp Nou y es inevitable revivir las escenas de nerviosismo y después, afortunadamente de alivio, del último precedente, todavía muy reciente. La noche en la que, por primera vez en la historia, una ambulancia entró en el césped del Camp Nou.
Ocho minutos angustiosos
Fue el pasado 10 de mayo, un martes por la noche. A la hora de juego, Ronald Araujo cayó desplomado después de chocar su cabeza con la de su compañero Gavi, en el intento de recoger un saque del meta rival, Ditruro.
El charrúa, con la fuerza mental y el pundonor que le caracteriza, se levantó e incluso dio unos pasos, desorientado, hasta que volvió a caer al suelo.
Entonces, el Camp Nou enmudeció. Eric Garcia y el celtiña Iago Aspas fueron los que primero percibieron la gravedad de la situación. También Alves, que pidió la entrada de la ambulancia. Ocho minutos angustiosos en un Camp Nou que rompió espontáneamente en gritos de 'uruguayo, uruguayo'.
Una vez en la camilla y con las cervicales bien inmovilizadas, Araujo pudo ser llevado en ambulancia en el Hospital de Barcelona, donde se recuperó con mucha rapidez. En el césped, el equipo azulgrana consolidó su victoria por 3-1.
El adiós de Leo
Hace dos campañas, el Celta se llevó el triunfo del Camp Nou en un partido que, a la postre, supuso el último de Messi con la camiseta azulgrana. Fue en la penúltima jornada de la campaña 2020-2021, la última se disputó en Eibar, pero ya sin ninguna opción en la Liga, ni Leo ni varios de los titulares viajaron a tierras vascas.
No fue la mejor despedida posible, pues el equipo dirigido por Ronald Koeman cayó por 1-2 esa fatídica tarde del 16 de mayo de 2021. De cabeza, el argentino adelantó al cuadro barcelonista. Su último gol como azulgrana, el 672, resultó ser de cabeza.
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La historia es conocida. El Celta le dio la vuelta al partido con un doblete de Santi Mina, la temporada en el Camp Nou acabó de mala manera y menos de tres meses después, el Barça anunció la no continuidad de Leo Messi. El mejor de todos los tiempos se fue entre lágrimas.