En el naufragio de Vallecas, el mejor con mucha diferencia fue un chaval de 19 años llamado Nico. Presionó, corrió, luchó, asistió, y fue el único que desbordó líneas con su potencia y su elegante planta. Es decir, hizo todo lo que no ha hecho De Jong esta temporada.
Mucho mejor el alegre y dinámico Nico de Vallecas que el apático y triste Frenkie que vimos ante el Madrid.