En una acción extraña justo en el arranque del partido, Neymar controlaba el balón en la zona central del campo tocando a los banquillos. El brasileño regateaba solo con dos futbolistas a cierta distancia y parece que se rebrincó el tobillo sin que nadie le tocara.
Neymar se tiró al suelo del Hard Rock Stadium y tuvo que ser atendido por los servicios médicos del Barça. El jugador salió a la banda y aunque en un primer momento parecía que le iban a sustituir regresó a los dos minutos al terreno de juego.
Finalmente quedó en un susto pero con Neymar a punto de cerrar su posible fichaje por el PSG, una lesión seguro que haría saltar por los aires todas las negociaciones.