Un día después de perder la Liga contra el Atlético de Madrid, Neymar voló a Brasil junto a su padre para volver a su país donde disputará el Mundial defendiendo los colores de su selección.
El delantero tiene ganas de reencontrarse con familia y amigos tras poner punto y final a su primera temporada como azulgrana. Ahora descansará antes de ponerse a las órdenes de Scolari para afrontar el último gran reto del año con la 'canarinha'.